Recuperamos un texto del artículo "CÓMO AYUDO A LA PERSONA A FORMARSE" del compañero Arnulfo Vázquez sobre las tres dimensiones de la formación en Práctica Psicomotriz Aucouturier : "De la formación personal a la teórica-práctica" .
Sus ideas son , desde luego, trasladables al aprendizaje en otras disciplinas , siendo éste es un ir y venir de la acción a la reflexión y viceversa , junto con la dimensión del proceso personal propio que hay que realizar a nivel afectivo y cognitivo.
Podéis ver este artículo completo en la página web de la Escuela Internacional de Práctica Psicomotriz PEI-EIP de Bilbao . En ella , también está la oferta formativa para el próximo curso .
"Creo que ahora más que nunca me queda claro que “la formación en la PPA” es
en sí una formación personal y que los tres aspectos (formación teórica,
formación práctica y formación personal) son en realidad “tres momentos” (o
vías de acceso), en función de los trabajos a realizar, para la formación personal,
es decir para el proceso de transformación de la persona:
- La formación teórica o teoría de la práctica no puede ser una serie de conceptos o teorías del desarrollo del niño desligados de la práctica, incluso de la historia personal de la persona en formación, ésta la significa en un nivel de representación más cognitivo. A través de este espacio-tiempo la persona puede acceder a la comprensión del niño, de la práctica, pero también de sí misma, es por ello que la teoría de la práctica” toca emocionalmente a las personas. Es la formación personal a partir de la comprensión teórica, y más aún a partir de la capacidad para la reflexión.
- La formación práctica o didáctica también es un espacio-tiempo intenso en la relación con el niño, no se reduce a la aplicación de una estrategia conformada por espacios y tiempos (la observación, la co-presencia y la práctica autónoma), sino en la relación con los niños que, lo sabemos bien, toca emocionalmente y apela a nuestra capacidad de comprensión e integración. Es la formación personal a partir de la práctica con el niño.
- La formación personal, como Bernard la considera “la llave de la bóveda de todo el aparato formativo”. La vía privilegiada y característica de “formación Aucouturier”, sin ella los otros “espacios y tiempos” de la formación no tendrían el impacto de la transformación de la persona a partir de la integración de los principios de acción de la práctica, del desarrollo del sistema de actitudes y de una comprensión conceptual que explique y de sentido a la práctica con el niño, sin ella la práctica Aucouturier podría ser reducida a “un método”.