Cuando hablamos de Derechos de la Infancia, siempre surge alguna voz que añade preguntas o ideas como: "Ya, pero ¿y dónde están sus deberes?", "¿sus responsabilidades?" , "si les decimos que tienen derecho a tantas cosas, ¿podemos crear niños y niñas tiranas? "

Esta declaración busca garantizar que las personas adultas pongamos a disposición de niños, niñas y adolescentes aquellos recursos económicos, sociales, familiares, afectivos ... que permitan
satisfacer sus necesidades como personas y favorecer el desarrollo de una serie de competencias para su desarrollo e integración integral. Para su presente, no para el futuro; porque ya son sujetos de derechos humanos desde que nacen.
satisfacer sus necesidades como personas y favorecer el desarrollo de una serie de competencias para su desarrollo e integración integral. Para su presente, no para el futuro; porque ya son sujetos de derechos humanos desde que nacen.
Todo esto se formula como Derechos en el sentido de que el mundo adulto es responsable y está obligado a que pueda cumplirse en el día a día y desde lo legal y jurídico. Y si no es así hay medidas que tomar. La Declaración de los Derechos de la Infancia tiene cuatro principios: Protección y Bienestar, Inclusión y no Discriminación, Interés Superior de la Infancia y Particiapación.
Padres, madres, profesorado, agentes educativas y otros somos responsables de que se cumplan estos cuatro principios y los Derechos de la Infancia. (e incluso podemos incluir a los propios niños y niñas ene ste bloque ya que han de ir aprendiendo, con nuestro apoyo, a asumir esta responsabilidad para con sus iguales). La adminsitración política y ciertos organismos están obligados a velar y ayudar para que podamos cumplir con ello.
El derecho de un niño o una niña , a veces , tiene que ver con poder tener "más" para satisfacer determinadas necesidades y avanzar en competencias. Tener "más" porque no se tiene suficiente ( puede ser tener un nombre, más calor en casa, más comida, más libros, más medicinas y, también, más tiempo de juego y ocio, más protección afectiva, más tiempo en familia, más responsabilidades, más participación en la resolución autónoma de problemas ... )
Otras veces, el derecho en la infancia puede estar relacionado con tener menos ( menos agresiones, menos frío, menos hambre, menos explotación laboral, menos juguetes, menos tiempo de videojuegos en soledad, menos comida procesada, menos exposición precoz a la pornografía, menos saturación de actividades extraescolares, menos sobreprotección...)
No es cuestión de más o menos, muchas veces, sino de garantizar la protección, la ayuda, el dar alas y el dar responsabilidades también.
Enlazamos con el artículo "El derecho a tener responsabilidades" de Kepa Torrealdea y algunas de sus reflexiones.
"La nuestra es una sociedad avanzada en la que, a pesar de no haber horrores como los mencionados, existen submundos con penurias reales, como lo son las familias que piden limosna o niñas y niños que viven situaciones de desprotección en diferente grado, al no tener cubiertas sus necesidades vitales. A pesar de que en nuestro entorno dispongamos de una avanzada red de servicios sociales, sanitarios y comunitarios, así como una cultura de solidaridad real que se nutre de un pasado migratorio que ha hecho de la hospitalidad un valor sumamente necesario y reconfortante, no debiera de haber pretextos para seguir apostando por fórmulas de mejora en la atención de situaciones de vulnerabilidad infanto-juvenil y, fundamentalmente, reflexionar sobre el tipo de sociedad que queremos crear y dejarles en herencia."
"Quizás debamos de mirar el logro de derechos no solo como un plus que debiera de ser conquistado o como una ausencia que hubiera de colmarse, en términos cuantitativos. Quizás, en la relativo a la infancia y adolescencia, tengamos que dialectizar y comprender que “más” no es necesariamente mejor ya que el más del mercado de consumo siempre es un menos."
Begoña Ruiz. Psicóloga, Referente de Protección a la Infancia en Bidegintza y educadora del programa Tratu-on . TRATU-ON | Bidegintza tratuon@bidegintza.org